Que rápido cantaba yo a los cuatro vientos no se qué de una etapa de siestas, sol y URBASÓN...ah no que era sol! Pero al final resultó que lo otro también. La noche se presentaba apacible en nuestro nidito marinero, terminábamos de cenar, mientras yo enviaba algunos whatsapp, Jara mordisqueaba su pelota, y mi chico concentraba toda su atención en un programa que estaban emitiendo en la tv, cuando de repente, empezó a picarme la cara, al principio era un picor normal, como de mosquito que acaba de encontrarte en mitad de la noche y te regala lo mejor de él, pero empezaron a parecer muchos mosquitos de esos.... Me levanté buscando un espejo para comprobar que mi cara seguía perteneciendome y no....parte de ella ya no lo era, así como otras zonas del cuerpo parecían estar mutando...Así que con mi habitual dramatismo (que reservo para situaciones limite), chillé desde el baño "Adrián prepara las cosas que nos vamos para urgencias" sonó un poco a me acabo de poner de parto...per...
Batiburrillo de ideas inconexas que clasifiqué en pestañitas