Compré libretas con hojas en blanco y bolígrafos de colores (con purpurina) para anotar todo lo emocionante, también fluorescentes para que lo reseñable no pasara despercibido. Una agenda con muchos días por vivir y pegatinas divertidas con las que adornarlos. Borradores (importantísimo), un paquete de cuatro para no quedarme corta, este año no quería tachones, a estas alturas si se pueden prever los tachones en mi vida se agradece. Por último un gran corcho para las cosas memorables, un tablón dónde inspirarme cuando en el despacho fijara la vista en ese trozo vacío que era antes mi pared (de gotelé, por si no fuera suficiente). Pero estaba vacío... Por eso tenía mil posibilidades....¡Como septiembre! En pinterest encontré miles de ideas, aunque he de reconocer que ésta fue un poco a boleo mío...Y diréis ¡se nota¡, te ha quedado horterilla, te ha quedado flamenca o te ha quedado cursi...yo a ratos lo pienso jajajaaj pero si salio así será que tengo algo de todo eso. No p...
Batiburrillo de ideas inconexas que clasifiqué en pestañitas